Don’t let the bastards grind you down
Margaret Atwood, The Handmaid’s Tale
Son expansivas, no distópicas. Me vinieron a la mente las túnicas de color sangre, pero fue un momento. Son figuras mágicas, libres. Mujeres, no cuerpos. Nunca objetos, premoniciones. Inminencia. Demonios que no son malévolos, sino shakesperianos, seres que pueden ser conjurados y muestran un camino todavía oculto, una senda nueva, cercana aunque inadvertida.