Tal vez sea un infierno de fuego. Sentimos una fascinación y un miedo irresistibles de forma simultánea. Queremos ver sin arder, sentir la luz sin el calor. En su interior imaginé un naraka particular e indoloro, una tumba ficticia cuando se apaga el ruido, un lugar de Valencia, la tierra del exceso irreverente y el volumen grosero. El lugar sin término medio. 55.000 cohetes con una intensidad de 2.000 cohetes por minuto. Es la cordà de Paterna.
2 respuestas a «El corazón del fuego»
Simplemente genial. Me encantan las miradas de los dos tiradores (fotos 3 y 5)
Muchas gracias, Antonio.