Valencia
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Te doy mi corazón
I will strike you with desire of fault lines, All fired up. Interpol El dealer de la esquina tuerce el gesto, como si no llevara un letrero en la cara. El calor transforma la calle en un tubo viscoso, orgánico, donde el aire pesa y busca acomodo sobre la carne. Un chaval recoge la papela…
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Los nombres de los muertos
Hubo un momento en el que el portavoz socialista, Manuel Mata, comenzó a recitar los nombres de los muertos. De aquellos que hace nueve años se fueron en el oscuro túnel de una línea del Metro de Valencia. Al ser invocados cada uno de ellos volvió al hemiciclo y se hizo presente en un silencio…
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Pronóstico
Viene a ser una historia un poco dickensiana, como la de «Pip» el niño de Grandes esperanzas. Una narración de crecimiento, de superación personal. Tal vez un paso hacia la madurez de una sociedad golpeada como pocas por el esperpento de líderes políticos extraídos del inframundo. Ojalá un nuevo tiempo, aire limpio, espacios para compartir…
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Anotaciones
Vivimos de escritos y morimos de tachaduras. Edmond Jabès Entre las paredes del trinquete de Pelayo hallé respuestas a algunas preguntas sobre lo que sea ser valenciano. Y también respecto a la naturaleza profunda de estas gentes de sangre impura, hirviente, taimada y creativa. Atravieso el bar, veo algunos rostros taciturnos -me lo parece- por…
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Contagio
Supongamos un cielo colapsado por neutrones, surcado de agentes nerviosos, compuestos orgánicos de fósforo, una lluvia de ántrax, una cortina de cloro. Un apocalipsis silencioso, leve, con cuerpos cayendo sin causa aparente. Una despedida sin sangre ni sonido, solo rota por la llegada de humanos enmascarados, a salvo de virus, bacterias y toxinas. Seres de…
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Donde juega Álvaro su última partida
Los trastornos obsesivos tienen sus ventajas y sus inconvenientes. Soy repetidor, ritualizador mental, numeral, atormentado y perfeccionista, según la clasificación de averías aceptada por eso que llaman mundo civilizado. Gracias a estas habilidades en ocasiones llego a los sitios con expresión alelada y mirada perdida. Me ocurre hoy, por ejemplo, y me gusta. Porque es…
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¿Por qué la gente corre maratones?
Me hago la pregunta. No soy el primero, claro. Parece haber muchas respuestas, supongo que casi todas válidas; no deja de ser un asunto personal. Se puede hacer una lista: Se corre para competir/ganar (necesidad de compensar inferioridades), para alcanzar un límite sin sobrepasarlo, por la energía colectiva (como en un concierto), por el dolor…
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El primer golpe
No recuerdo el día con exactitud. Sé que jugaba Javi y que recibí un pelotazo suyo en la sien que me tuvo una semana acariciándome el cráneo. De aquel modo supe que se trata de un juego colectivo que incluye también los cuerpos de los espectadores. De aquella manera, al igual que con el primer…
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Boato
Se detiene el reloj con un último crujido de su anciana maquinaria. Apenas un clic y ya no existe el tiempo, muere congelado ante mis ojos, cae sin respiración, lívido. Llega un coche a la plaza y la pequeña banda arranca un desafinado pasodoble en el que manda un bombo. Llega el nuevo arzobispo al…
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Costura
-Si no te gusta la idea de un Dios masculino -dijo Mitchell- ¿por qué reemplazarla por la de un Dios femenino? ¿Por qué no librarse de la idea total de una divinidad con sexo? fragmento de La trama nupcial, de Jeffrey Eugenides Un ciclo. Mujeres cuyos rostros y cuerpos me resultan familiares. Mientras una música…
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Let´s make some fucking noise
El tipo que clausura el festival Marenostrum es un dj que se llama Quintino y tiene aspecto de holandés criado en barrio pijo. Jura desde lo alto del escenario no haber visto nada como el público valenciano. Me he liado la manta a la cabeza aprovechando que ayer me dejaron medio sordo, para completar el…
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Zumbidos en la torre
Cuando era crío una infección me dejó el tímpano dañado. Envuelto en decibelios, la vieja herida trasforma mi cerebro en una lavadora vieja. No es la primera vez, ni será la última. Me crujen los huesos. La tierra tiembla. Ya he escrito frases serias sobre el abandono causado por el ritmo. Estoy aquí, rodeado de…
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Valencia en días así
Llueve agua por la mañana y llueven flores por la tarde. Bajo ella, al mediodía, resbala el pueblo y juegan los niños al ritmo de unos tipos vestidos de trogloditas, bajo ellas, a media tarde, pasa la bella y enorme custodia labrada en oro, el aroma de las rosas recorre desde hace siglos las calles…
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En el viento
Por estos andurriales no se sabe muy qué ha sido eso de las elecciones europeas. Fuera de la ciudad, lejos de la reverberación del asfalto, donde los paisanos con los que paras a tomar un café piden al ver la cámara darle «caña a los urbanitas», la noticia es el paso de animales de cuatro…
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La ardiente luz de la fe
Una figura antigua, de seiscientos años, un símbolo asoma a la plaza y los seres quedan boquiabiertos, asombrados bajo la luz cegadora de la fe. Me fascina como espectador el éxtasis del creyente, la oración, las lágrimas, los niños volando sobre las cabezas, convertidos en ofrenda, encomendados al más allá presente en el más aquí.…
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A las cinco de la tarde
Fotografías tomadas en la feria de Fallas de Valencia los días 13, 14, 15, 16 y 19 de marzo Una madre fotografia a sus hijos ante el animal mientras los matarifes hacen su trabajo. Luego pregunta «¿Queréis que vayamos ahora a ver a los caballitos?». El jefe de ese lugar, o el que lo…